Viajas con equipaje vacío, de telas de sangre y calor, y con tu cuna hecha de sol, meces a ese ser sin cara al ritmo de los pasos de tu corazón caliente. Y en ti despierta algo nuevo, algo extraño, algo ameno, el amor del nuevo ser que es lo único que hay ahora mismo en tu cuerpo que parece una campana repleta de sonidos armoniosos que nunca deberían dejar de sonar…
(a ti, compañera)
FOTO: CHEMA MÁDOZ
TEXTO: JOSA
qué hermosura
Me gustaMe gusta
PRECIOSA LA FOTO Y PRECIOSO EL TEXTO
Me gustaMe gusta