Es lo que tiene soñar con una espalda
que duerme con otro,
que se muestra a otro,
aunque él ni siquiera la mire.
Mejor así,
Esa espalda será siempre mía…
Eternamente.
Me hundo…
Pero me hundo hacia arriba
Mientras me agarro a tu espalda
Para seguir flotando dentro
De este sueño del que no quiero salir.